Recuerdo aquel instante en el que, por primera vez, tu mirada, sin ninguna intención, con la mia se cruzó.
Aquella ocasión en la que tu voz , por fin, escuché y en tu forma de andar me fijé provocando una sonrisa que , desde entonces, vuelve a aflorar con cada pensamiento a tí dirigido.
Nunca lo sabrás ni lo entenderías si lo supieras pero, mía, ya has sido.
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Y si dejó huella a fuego en tu corazón, seguro que seguirá siempre siendo tuya.
ResponderEliminarUn Abrazo.
Tuya en tu mirada, en tu pensamiento, incluso en tu corazón. En aquel instante y siempre que aflore en ti esa sonrisa.
ResponderEliminarBonito sentimiento.
¿Qué tal fue la tertulia literaria?
La tertulia estuvo muy bien pero no me dió tiempo a leer lo tuyo.
ResponderEliminarLa próxima será el 10 de Noviembre y en esa no te escapas de ser leída.