miércoles, 28 de octubre de 2009

Era una silla desvencijada.
Cojeaba y al sentarse en ella daba la impresión que de un momento a otro se iba a desplomar.
Nadie la quería, todos los clientes del bar elegían a otras y , si algún despistado, la probaba , inmediatamente la cambiaba por otra.
Las demás sillas se reían de ella.
¡Eres una inútil! - le decían.
¡Nadie te quiere! - insistían.
Pero ella no contestaba.
Ella permanecía tranquila.
Es verdad que nadie la elegía pero eso le libraba de tener que soportar el peso de nadie, de los olores, de los sudores.
Se sentía afortunada.
Un día la retiraron, la hicieron astillas y acabó en un vertedero.

lunes, 26 de octubre de 2009

Una vida (I)

El frío casi no le permitía mover los dedos.
Llevaba varias horas inmóvil , esperando la llegada de su víctima de hoy. Lo peor de todo era no saber si por fin aparecería o no.
Ese era su trabajo y no tenía derecho a quejarse, otros lo estaban pasando peor que él, a fin de cuentas se había presentado voluntario.
Por fin , después de varias horas de espera, apareció.
Lo fijó en su objetivo.
Apretó el gatillo y una silueta cayó fulminada al suelo, inerte.
Recogió sus utensilios de trabajo y se fue, tal y como había venido, sin remordimientos, sin pensar más en aquel individuo que ya no lo era.
Redactó su informe, era el número veintisiete pero le habría dado igual que fueran cuarenta o doscientos, solo era su rutina y nada más.

Treinta años después en su lecho de muerte se preguntaba por qué no volvió el arma contra si mismo la primera vez que tuvo que hacerlo.
La respuesta la sabía.
No tenía ninguna duda.
Si volviera a encontrarse en la misma situación haría exactamente lo mismo con una sola diferencia y es que ahora sabría por qué lo hacía.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Dos veces te llamé,
dos veces te supliqué,
dos veces añoré tu presencia.

La tercera me lo pensé
no te llamé
y no te supliqué.

Ahora tu me llamas,
me suplicas,
dices que me añoras.

Y yo te digo,
tu no me quieres a mi,
tu no te quieres a ti.

domingo, 18 de octubre de 2009

¿Qué es la maldad? - preguntaba un discípulo a su maestro.
La maldad somos tu y yo - respondió el maestro.
Entonces, si nosotros somos los malos, ¿Los demás son los buenos? - volvió a preguntar el discípulo.
No, nosotros somos los malos por no ser iguales a los demás y los demás son los malos por no ser iguales a nosotros - volvió a responder el maestro.

El discípulo se fue preocupado por no entender nada.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Nada es lo que parece,aunque rara vez nos damos cuenta.
Las mejores intenciones provocan daños de difícil solución
y lo que hacemos sin querer, sin pensar, nos lo reconocen como buenas obras.

Quiero un mundo en el que cuando no quiera hacer daño , no lo haga y
cuando, si que sea esa mi intención, esté obligado a pensarmelo dos veces antes de ejecutar.
Quiero un mundo donde el ser bueno no sea sinónimo de tonto y
el ser malo no lo sea de listo.
Quiero un mundo donde dar sea una virtud y coger un mal necesario.
Quiero un mundo donde las palabras sirvan para entenderse y no para insultarse.
Quiero un mundo que no existe.

viernes, 9 de octubre de 2009

En la extraña hora de la soledad,
cuando ya nada ni nadie te molesta,
cuando gritas en silencio,
cuando callas sin quererlo.

En ese momento vacío,
del que todos huimos,
en el que todos caemos
y que casi nadie conocemos.

Ahora que lo tengo conmigo,
lo comprendo, lo deseo,
es parte de mi ser
y como tal, conmigo lo quiero.