Reinventarse una y otra vez.
Volver a empezar aunque sea desde cero haciendo añicos todo lo atesorado, si fuera necesario, con el único objeto de sobrevivir, de no despeñarse y aterrizar en el fango pringoso del fracaso, con la premura del tiempo que cada vez es más escaso y con la débil esperanza de no volver a equivocarse.
Pero ¿cómo se empieza de cero?.
martes, 5 de junio de 2018
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