Al atardecer, cuando ya el día empieza a declinar y vas abandonando para el día siguiente lo que hoy no hiciste o dejaste a medio terminar, cuando te sientas un rato esperando decidir si avanzas un poco más en alguna de esas cosas que siempre están ahí o empiezas con otra de esas que, estando también siempre ahí, hasta ahora no habías tenido ganas o tiempo de empezar, es en ese momento cuando más presente se hace si sonries o no, si te sientes contento con lo hecho o intranquilo por lo pendiente de hacer, es cuando , en la tranquila soledad, eres del todo consciente de tu estado de felicidad o de su ausencia.
Al atardecer, cuando ya no hay ruido dentro de mi cabeza ni zumbido de moscas que me recuerden la anormalidad de mi ser, cuando la cabeza se toma un respiro y se limita a sentir, cuando se deja llevar por el recuerdo de lo vivido y el ansía por lo que queda por vivir, es entonces cuando más presente se hace lo mucho que queda por sentir, por amar, por acariciar, por dar y recibir.
Al atardecer es cuando más cerca estoy de volver a ver mi jardín.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ni te imaginas lo identificada que me he sentido con lo que has escrito!
ResponderEliminarEse miedo tan inevitable al recuerdo de esos besos, abrazos, compartir una cervezas, cuando sientes que no puedes respirar por la ausencia de ese alguien que no quieres despegar de tu pecho...el maldito miedo de volver a enamorarte.
Nadie te puede robar los sentimientos auténticos de amor hacia alguien que un día consideraste la persona más maravillosa del Universo). Es entonces cuando más presente se hace lo mucho que queda por sentir, por amar, por acariciar, por dar y recibir...
Un abrazo Lulio.
Siempre queda mucho por sentir, por dar y recibir pero para hacerlo hay que cerrar bien las viejas puertas.
EliminarLas noches siempre son fieles compañeras de los monstruos que habitan en nuestra mente, también de las pasiones secretas y de todo lo que nos gustaría empezar o acabar. No sé si ponemos todo en orden o patas arriba.
ResponderEliminarSupongo que si lo sabes canalizar bien, también es tiempo de paz y de calma.
Ojalá encuentres el punto medio y consigas todo lo que anheles.
Un abrazo.
Estoy en ello pero los puntos medios se me resisten. Hay más de montaña rusa que de otra cosa.
EliminarAl atardecer....Preciosa despedida!!,
ResponderEliminar