Mirada extraviada que no sabes si es por falta de luces o por ausencia total de ellas.
Movimientos extraños, nunca elegantes, mas propios del heredero de la corona que está acostumbrado a gandulear mientras espera que le llegue el turno de reinar aún sabiendo que este nunca llegará.
Hambre infinita, sueño perenne, lealtad desconocida e instintos carentes de toda lógica.
No sabes si es tonto o es tonto pero , en ocasiones, lo disimula y aparece una mirada inteligente que es solo fruto de una equivocación del azar.
Así es y a él no le importa así que ¿quién soy yo para juzgarle?.
Vive feliz o eso aparenta y a él le basta y le sobra.
Es Nilo y lo será mientras él quiera serlo.
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