sábado, 14 de abril de 2018


   Era 20 de Mayo y el calor ya empezaba ser aburrido. Lo había recibido casi con entusiasmo pero como todo lo que se repite era ya de una pesadez insolente. Miraba por la ventana de su casa y al ver el sol calentando el asfalto se le quitaban las ganas de pisar la calle y como trabajaba desde casa tampoco tenía mucha necesidad. En ocasiones pasaba días sin salir. Encargaba la comida por teléfono y entre el trabajo y gandulear a ratos se le pasaban las horas casi sin darse cuenta.

   Tenía un proyecto entre manos que debía tener terminado antes de acabar la Primavera pero le estaba costando más esfuerzo del que había pensado. Su vida era la publicidad y estaba en ese momento en el que se iba a decidir si daba el salto a la primera línea de los grandes o se quedaba como segundón durante unos cuantos años más o durante el resto de su vida.
Comida para canarios reconvertida en comida para humanos.

   No, no era eso. Piscivol era una empresa especializada en comida para pájaros pero por una de esas cosas extrañas que hace la gente habían decidido fabricar también comida para humanos y estaban empeñados en hacerlo con el mismo nombre para aprovechar la fama que ya tenían.
Lo habían discutido hasta el aburrimiento con el dueño de la empresa pero el muy tarugo se cerraba en banda y ahora no veía la forma de hacer que la gente comprara para su consumo algo de la misma marca con la que se vendía la comida de los periquitos y eso le estaba provocando un estres y una ansiedad que amenazaba con hacerle perder el poco pelo que le quedaba y eso que todavía era joven.

   Coño. Si solo tengo 32 años y ya tengo más cabeza sin pelo que con él – exclamó al mirarse
al espejo cuando se disponía a peinarse y al mismo tiempo observo un minúsculo intruso que se paseaba por la pared que estaba justo al otro lado. Cogió la chancleta y aplastó al bicho sin compasión y al mismo tiempo … ¡Claro!. Eso es. Ya tenía la solución a todos sus problemas.
Si un naranjo podía convertirse en limonero haciendo el injerto correcto o en mandarino porque no disociar la marca de la comida para pajaritos y asociarla a la alimentación en general.

¡ALIMENTACIÓN!. Ese era el truco.

   Piscivol ya no sería una marca de comida para nada en concreto. Se convertiría en una marca de nutrición para seres vivos y así podrían abarcar a cualquier tipo de animal. Era genial. Todavía no se podía creer como no se le había ocurrido antes siendo tan sencillo.
Ahora solo le quedaba preparar una presentación espectacular, buscar una frase con gancho, una imagen de referencia. Si, si, eso era......

Bip, bip, bip...
   La máquina iba señalando los latidos de su corazón y su cuerpo estaba conectado a varias máquinas que monitorizaban todas sus constantes vitales.
¿Qué le ha pasado a este? - preguntó la enfermera que entraba de guardia a la que estaba relevando.
   No lo se muy bien pero Juan me comentó que resbalo en el cuarto de baño al pisar algo húmedo que había en el suelo y está en coma. No creen que se pueda recuperar pero nunca se sabe. El caso es que me ha parecido verlo sonreir varias veces pero... a saber.

Y sonreía. Claro que sonreía.

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