jueves, 20 de octubre de 2011

Dicen que , cuando todo acabe, seremos juzgados y recompensados o castigados según nuestros actos.

En ese juicio no valdrán las mentiras , los engaños o el disimulo porque el juez lo sabrá todo y aplicará tanto el castigo como la recompensa de una manera justa y ecuanime.

El problema es que todos defendemos haber sido buenos y si no lo hemos sido ha sido forzados por las circunstancias. Nadie reconoce su culpa o sus malos actos por lo que los castigados defenderan su inocencia y no creerán en la justicia que se les aplica.

Sin embargo yo he decidido creer y por lo tanto , como creo en su imparcialidad voy a reunirme con él y comprobar como me juzga.
Si lo hace bien, volveré y os lo diré para que esteís tranquilos pero si no es así entonces no volveré y esperaré para ver vuestras caras cuando os caigan los sopapos.

3 comentarios:

  1. Creo que tienes razón, debería preocuparme mas de mi conciencia que de la conciencia de los demás. Por cierto......cuando seas juzgado y veas como te juzgan, no hace falta que vuelvas para contarlo, ya intentare hacerme una idea. Hml

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  2. Todos en esta vida tendremos que rendir cuentas. Ese es la mayor conclusión. Sabes me gustaría que conocieras y leyeras mis blogs si tienes tiempo.

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  3. gracias por hacerte seguidor mis temas que hablo en mi blog son interesantes. No son muy largos.

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