¿Cordura o felicidad?.
Conforme mejor me siento más pierdo el norte y si recapacito, me ordeno, organizo mi vida y sano me vuelvo la tristeza me invade y me voy encogiendo hasta hacerme casi invisible de lo pequeñito que me vuelvo.
Mi felicidad provoca la infelicidad de quién me rodea.
No puedo estar loco en un país de cuerdos pero mi locura de compañía necesita y, a la vez, esa compañía no puede soportar mi continuo paseo por la cuerda floja.
Quizás no esté loco, quizás lo estemos todos, quizás..... da igual.
Al final, el resultado es el mismo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
jejeje............no debes ser buena compañia
ResponderEliminarQuizás, quizás, quizás..........hml.
ResponderEliminar