viernes, 4 de mayo de 2012

Poniendo toda mi atención, todo mi corazón, mi imaginación y mis sentidos he volado a otro mundo.

Un mundo desconocido para mi y que, sin embargo, me sonaba familiar, cercano e incluso, añorado.

He leído, bebido y sorbido todas las letras como si cada una de ellas fuera nueva y diferente, como si su sonido no tuviera nada que ver con el siempre escuchado.

Y he soñado.

He soñado con alas de mariposa, con vientos huracanados y volcanes embrabecidos. Con vuelos rasantes y picados escalofriantes a la vez que con la calma chicha y la pausa del lento atardecer. Y , al despertar, mi sueño ha continuado y se ha agrandado con el recuerdo de caricias y suaves miradas.

No podré olvidarlo mientras viva porque ese recuerdo de algo que no es mio ya lo he capturado y vivido dentro de mí esperando, algún día, poder decir :

"Sí, es verdad, existe porque yo he estado ahí".

2 comentarios:

  1. Muchas veces no vale la pena...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A veces no, a veces si. Nunca lo sabes hasta que ya estás metido de lleno.

      Eliminar